Las potenciales culturales de Utebo, una de las localidades más pobladas de la provincia zaragozana (con más de 15.000 habitantes), se han demostrado este jueves en el pabellón de la Diputación. Durante toda la jornada, cantos corales, jotas, representaciones teatrales y exhibiciones de trajes de época han animado un día que Utebo ha aprovechado para mostrarse con toda su plenitud. Además, una maqueta de la célebre torre mudéjar de la localidad, de dos metros de altura y 40 centímetros de base, se ha mostrado en la sala principal del edificio. La obra, firmada por el artista local Jesús Marteles, está realizada con ladrillos, cerámica y barro cocido, tardó seis años en materializarse.
El colorido musical del día lo han aportado las jotas y el canto coral. Las primeras han sido interpretadas por “Los Zagales de Utebo” y se han simultaneado mañana y tarde con las piezas musicales de la coral “Octavus ad Urbem”. Esta agrupación, formada por cerca de 20 miembros, ha cantado temas clásicos y canciones más modernas, todas ellas a capella.
La parte dramatúrgica y cultural de la jornada la han aportado los grupos de teatro “Con Ton y Son” y “Boirada”, que han representado pequeñas obras de diez minutos sobre la creación de Utebo (fundada por militares romanos retirados en la octava milla romana –de donde procede el nombre- en el siglo I DC) y sobre el proceso de construcción de la torre mudéjar (denominada “Campanar de los espejos” por sus adornos de cerámica, una de las más hermosas de Aragón y simulada en el Pueblo Español de Barcelona).
Ambas actuaciones, adecentadas de algunos toques de humor e interactividad, han cautivado la atención del público congregado y han demostrado la importante cantera teatral que existe en la localidad.
Por último, el paseo histórico por Utebo no hubiera sido completo sin una pequeña muestra de la participación del municipio en la Guerra de la Independencia. Para ello, la Asociación local Los Pardos ha participado en una recreación artística de la milicia homónima que luchó en los sitios a principios del siglo XIX. Un grupo de hombres ataviado con la indumentaria y las armas que portaron los militares de la ribera del Ebro ha custodiado la puerta del pabellón.
“Lucharon a la llamada de Palafox, defendieron Utebo, Monzalbarba o Sobradiel y eran civiles. Tenemos que recordarles”, ha explicado uno de los integrantes de la formación. El estandarte y bandera del regimiento, que ha presidido sus recreaciones, fue robado por los franceses al fin de la guerra y años más tarde pudo ser recuperado. “Ahora lo lucimos con honor”, han agregado.
Con esta gran oferta cultural e histórica, en la que ha participado más de 70 personas, Utebo ha aprovechado su día en la Expo para promocionarse y mostrar sus potencialidades cívicas. En suma, ha traído hasta “este balcón” parte de la historia de la localidad, abarcando todas sus épocas, para enseñar a los visitantes su realidad, con un importante y dinámico tejido asociativo.
Más imágenes en nuestra galería Flickr
El colorido musical del día lo han aportado las jotas y el canto coral. Las primeras han sido interpretadas por “Los Zagales de Utebo” y se han simultaneado mañana y tarde con las piezas musicales de la coral “Octavus ad Urbem”. Esta agrupación, formada por cerca de 20 miembros, ha cantado temas clásicos y canciones más modernas, todas ellas a capella.
La parte dramatúrgica y cultural de la jornada la han aportado los grupos de teatro “Con Ton y Son” y “Boirada”, que han representado pequeñas obras de diez minutos sobre la creación de Utebo (fundada por militares romanos retirados en la octava milla romana –de donde procede el nombre- en el siglo I DC) y sobre el proceso de construcción de la torre mudéjar (denominada “Campanar de los espejos” por sus adornos de cerámica, una de las más hermosas de Aragón y simulada en el Pueblo Español de Barcelona).
Ambas actuaciones, adecentadas de algunos toques de humor e interactividad, han cautivado la atención del público congregado y han demostrado la importante cantera teatral que existe en la localidad.
Por último, el paseo histórico por Utebo no hubiera sido completo sin una pequeña muestra de la participación del municipio en la Guerra de la Independencia. Para ello, la Asociación local Los Pardos ha participado en una recreación artística de la milicia homónima que luchó en los sitios a principios del siglo XIX. Un grupo de hombres ataviado con la indumentaria y las armas que portaron los militares de la ribera del Ebro ha custodiado la puerta del pabellón.
“Lucharon a la llamada de Palafox, defendieron Utebo, Monzalbarba o Sobradiel y eran civiles. Tenemos que recordarles”, ha explicado uno de los integrantes de la formación. El estandarte y bandera del regimiento, que ha presidido sus recreaciones, fue robado por los franceses al fin de la guerra y años más tarde pudo ser recuperado. “Ahora lo lucimos con honor”, han agregado.
Con esta gran oferta cultural e histórica, en la que ha participado más de 70 personas, Utebo ha aprovechado su día en la Expo para promocionarse y mostrar sus potencialidades cívicas. En suma, ha traído hasta “este balcón” parte de la historia de la localidad, abarcando todas sus épocas, para enseñar a los visitantes su realidad, con un importante y dinámico tejido asociativo.
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